ANOMIA (PARTE 2): ANOMIA SEMÁNTICA Y ANOMIA FONOLÓGICA

ANOMIA SEMÁNTICA

información conceptual multimodal

Cuando se altera la información semántica, también se afecta la capacidad para tener palabras, pero en la anomia semántica se pierden los conceptos, la información que tenemos sobre las cosas y, aunque tengamos una palabra, esta carece de significado (o de parte de ese significado). Pero esta afectación va más allá de las palabras, pues únicamente tenemos un almacén de significados y es común para todas las actividades (ya sea de producción o comprensión) y tipos de información (verbal oral o escrita, visual, motora,gustativa, etc.), por lo que la pérdida de información realmente no ocurre en el sistema de procesamiento lingüístico (aunque de manera secundaria también falla el lenguaje y la comunicación), sino que hace referencia a un tipo de memoria, la memoria semántica -por lo que este cuadro podría denominarse trastorno semántico o amnesia semántica-. 

Esta anomia es común en la enfermedad de Alzheimer (y se tratará más detenidamente en una entrada posterior), aunque también puede ocurrir en daño cerebral adquirido. 

La información semántica que pierden los pacientes tras daño cerebral puede afectar a unas categorías y no a otras; por ejemplo, a seres vivos o a objetos, dentro de estos, se puede perder específicamente un tipo concreto, como herramientas y la pérdida del concepto puede ser mayor o menor; es decir, guardamos mucha información de las cosas, pero cuando se pierde en daño cerebral, puede quedar cierta información de un concepto (o perderla toda).  

El tipo de error que cometen los anómicos semánticos suelen ser la falta de respuesta (ya que desconoce el concepto, no tiene o no accede a la información y datos de algo) y las parafasias semánticas, es decir, palabras que son similares porque comparten muchas características (gato en lugar de perro), porque es la categoría supraordenada (animal) o porque tienen mucha relación por asociación (correa). También utilizan diferentes características para obtener información, pero a veces esta información que abstraen no es correcta (por ejemplo, un paciente categorizó a la mosca como pájaro pequeño porque vuela). 

ANOMIA FONOLÓGICA

información fonológica: fonemas y secuencia

Por otro lado, está la anomia fonológica, es decir, la que se produce cuando falla la correcta selección de fonemas y/o en organizarlos en la secuencia concreta que forma una determinada palabra, una vez sabemos cuál es la palabra. En estos casos se producen errores (o parafasias) fonológicos, es decir, se cambian, se omiten o se añaden fonemas, dando lugar a palabras parecidas que pueden existir o no (aunque a veces la alteración es tan importante que si hay muchos cambios el parecido con la palabra real es muy bajo y se denomina neologismo). Este proceso es común para todas las actividades orales, por lo que los fallos ocurren cuando se habla, cuando se denomina, cuando se repite o cuando se lee. Generalmente, cuando son conscientes, los pacientes realizan varios intentos para decir bien la palabra (aunque muchas veces dicen diferentes palabras parecidas incorrectas); en otras, hay anosognosia, es decir, no hay conciencia de las dificultades, y puede haber jergafasia, es decir, un habla fluida repleta de parafasia fonológicas y neologismos y, por tanto, ininteligible.