JUEGOS PARA PEQUES: MI PRIMER TOTEM

Mi primer tótem es un juego de mesa “individual” para niños a partir de año y medio, con el objetivo de construir diferentes tótems apilando o juntando piezas magnéticas, reproduciendo los retos propuestos en tarjetas que van aumentando paulatinamente su dificultad. Está formado por 8 piezas magnéticas muy coloridas y llamativas y algunas de ellas hacen ruido al moverlas (tipo sonajero). Los bloques son: una base (con un lado naranja para encajar los cubos y un lado azul donde encajan los cilindros anchos), dos cilindros anchos y uno estrecho, dos cubos, una semiesfera y otra con orejas de conejo. Además, algunos de los bloques tienen dibujos o formas en los laterales que después serán importantes para saber cómo orientarlos. Aunque es un juego “solitario”, con niños tan pequeños siempre es conveniente estar con ellos, a veces jugando juntos y otras veces únicamente observando o “respondiendo” a sus preguntas y frustraciones (son muy curiosas sus reacciones las primeras veces que las piezas, por “arte de magia”, se atraen o repelen).

Es un juego con cierto recorrido en edad: está recomendado a partir de año y medio, donde prima el juego libre donde observarán las piezas, las juntarán entre ellas, harán torres y las destrozarán y esto les permite descubrir los efectos de atracción y repulsión magnética (y su asociación con las diferentes formas: los cuerpos geométricos iguales se repelen entre sí, por lo que hay que intercalar las diferentes formas); más adelante, aunque continuarán haciendo juego libre (y realizando tótems más complejos) también comenzarán a realizar los retos (inicialmente con ayuda) pero sin fijarse en los “detalles” (la orientación de las fichas, tanto qué va hacia arriba/abajo, como la cara que ponemos mirando hacia adelante), para más adelante reproducir de manera más fidedigna los modelos. 

A pesar de su sencillez y de estar dirigido a niños bastante pequeños, pone en marcha toda una serie de funciones cognitivas, con especial importancia de las funciones ejecutivas. Entre las más destacadas, encontramos:

Atención sostenida: ya sea explorando de manera libre y, sobre todo, realizando los retos, se requiere que los niños se concentren. A esto ayudan los efectos del magnetismo, las piezas y tarjetas coloridas y cierto sonido que hacen algunas de las piezas (muy tenues, pero atractivas para los pequeños de la casa).

Atención selectiva: realizando los retos, se requiere que los niños se fijen, por un lado, en el orden de las piezas (ponen la base o la primera ficha y a continuación tienen que centrarse solo en qué pieza va encima, en el lateral o dentro de ella) y, cuando son más mayores, tienen que centrarse en los detalles de las piezas para orientarlas correctamente. 

Secuenciación: para realizar los retos, las piezas se deben colocar en el orden correcto, realizándose desde abajo hasta arriba.

Pensamiento lógico inductivo: en base a la experimentación con este y otros juegos con imanes, los niños irán comprendiendo las propiedades específicas de estos. 

Motricidad y coordinación ojo-mano: requiere un mínimo de motricidad fina y coordinación para juntar las diferentes piezas o introducir una dentro de otra, pero al estar dirigido a niños a partir de año y medio no se requiere una coordinación fina muy desarrollada para poder jugar, pues las piezas son bastante grandes. 

Creatividad: la tendencia inicial de los niños es hacer simplemente torres con una pieza sobre otra pero, aunque son pocas piezas, estas se puede apilar de formas diferentes, habiendo una que se puede meter dentro de otra, piezas que permiten atraerse y mantenerse lateralmente, etc., haciendo construcciones muy diferentes. 

Automonitorización: esta capacidad no se pone en marcha en niños pequeños, pero pueden ir aprendiendo por modelaje, viendo cómo lo hacemos los mayores, a comprobar si su ejecución es correcta, igual que el modelo propuesto. 

Vocabulario relacionado con la construcción (encima, debajo, etc.), con las formas (cubo, cilindro, semiesfera, etc.), con los colores, etc. y, a diferencia de otros juegos de construcción, el que hace referencia a los imanes (atracción, repulsión, imanes, polos, etc.).